Hay un poema muy bello que dice:
Si amas a alguien, déjalo ir
Si regresa, es tuyo.
Si no regresa, nunca lo fue.
Sin embargo, existen muchas variaciones del poema original, aqui les dejo algunas....
DEL PESIMISTA:
Si amas a alguien, déjalo ir.
Si, como era de esperarse, no vuelve,
nunca fue tuyo y, sinceramente,
ya te mandó a la mierda!
DEL OPTIMISTA:
Si amas a alguien, déjalo ir;
y ni te preocupes que...regresará!
DEL DESCONFIADO:
Si amas a alguien, déjalo ir;
y, si por casualidad vuelve,
pregúntale a qué volvió,
a donde mierda fue, con quien mierda estuvo,
y por qué cresta se tardó tanto.
DEL IMPACIENTE:
Si amas a alguien, déjalo ir.
Si no vuelve en las próximas dos horas,
Llámalo al celular,
anda a su casa y pregúntale
a todas las personas por él,
incluso llama a la policía y a la radio
para que todo el mundo se ponga a buscarlo.
DEL PACIENTE:
Si amas a alguien, déjalo ir.
Si no vuelve, ponte cómodo,
y sigue esperando hasta la eternidad,
que algún día regresará.
DEL JUGUETÓN:
Si amas a alguien; déjalo ir.
Si vuelve y todavía lo amas,
déjalo ir otra vez y otra vez y otra vez;
y así sucesivamente.
DEL VENGATIVO:
Si amas a alguien; déjalo ir.
Si vuelve, ahora vete tú,
para que sienta lo mismo el imbécil
a ver si le gusta!!.
DEL ABOGADO:
Si amas a alguien; déjalo ir.
Y busca en el Código Civil la parte que habla
del abandono de hogar por parte de un cónyuge.
Si te convienen los términos, entabla juicio y
.... déjalo en la calle.
DEL ESTADÍSTICO:
Si amas a alguien; déjalo ir.
SI TE QUIERE, LAS POSIBILIDADES
DE QUE VUELVA SON DE UN 86.5%.
SI NO TE QUIERE,
TUS RELACIONES CAEN EN EL CAMPO
DE LO PROBABLE,
CON UN MARGEN DE ERROR DE 3%.
DEL POSESIVO:
Si amas a alguien, no lo dejes ir,
¡no seas IDIOTA!
DEL GOBIERNO:
Si amas a alguien cóbrale impuestos.
Si no los paga, todos sus bienes son tuyos.
Si los paga, son muy bajos, cóbrale más y que demore más el trámite.
EL PSICOANALISTA:
Si amas a alguien, déjalo ir.
Si vuelve, es porque su ego es muy dominante.
Si no se quiere ir, es porque está loco.
DEL SONÁMBULO:
Si amas a alguien, déjalo ir.
Si vuelve, es una pesadilla.
Si no vuelve, debes estar soñando.
DEL EXPERTO EN MARKETING:
Si amas a alguien, déjalo ir.
Si vuelve, es una persona leal a su marca.
Si no vuelve, es hora de hacer una acción de fidelización y retención.
28 de febrero de 2008
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